La elegancia del erizo

O L'élégance du hérisson, título original.

 

Bien, os cuento que me leí este libro de Muriel Barbery este verano. Y sin duda alguna, ha pasado a mi lista de favoritos desde la página 54.

 

Así que obviamente, lo recomiendo. Nunca había leído nada parecido. Un libro que habla sobre la vida cotidiana de la clase alta, se mete en ella, la comprende y la crítica -y con ella, a la sociedad- de una forma tan hermosa, tan elocuente, con unas palabras tan perfectas... Que te recreas en la elegancia del uso del lenguaje, y te olvides de todo lo demás.

 

Contada a través de diferentes personajes -aquellos que consiguen salir de los estereotipos que les han sido asignados- es, quizás, algo radical en algunas ocasiones, y sin embargo, se le perdona todo. Está tan bellamente escrito, habla de conceptos abstractos tan poéticamente y tan profundos, que es imposible dejar de leer. Eso sí, a veces hay que releer algunas frases para acabar de comprender su complejidad.

 

En cualquier caso, un libro que enamora... A contrario de su película, El Erizo.

 

Esta película del 2009, dirigida por Mona Achache no consigue capturar la poesía del libro, que su mayor cualidad son las palabras. Una película que se hace un poco lenta, muy silenciosa, y que no consigue ni de lejos profundizar en los pensamientos de los personajes -algo lógico, teniendo en cuenta que la mayor parte del libro son pensamientos.

 

Por lo tanto, ¿recomiendo esta película? Mas o menos. Ocurre que no he conseguido olvidarme del libro durante el largometraje, pero diría que como película no es mala. Además, nos introduce a factores seriamente importantes.

 

¿Está bien adaptada? Sólo os diré que si tenéis la ocasión de elegir entre película y libro... No dudéis. El libro no tiene tantas páginas...